El Musical Story Show se desarrolla en el escenario de un auditorio, la acción comienza con el Policía “Falín” e Inma “la Educadora” transportando el pesado cofre que contiene “El tesoro de los niños”, que dejarán en una esquina del escenario, a la vez que entran en escena, entretenidos cuentos donde Cobran vida personajes como Leoncio, un león muy despistado; Prudencia, una vaquita muy sensata y precavida; junto con los personajes de las canciones y cuentos de José Vázquez, policía local de Oviedo y Tuca.
Mientras los cuentos y las canciones se suceden, los niños permanecen atentos a las historias y pendientes de que el malvado Accidentón -cobra vida en un policía de la ciudad- no robe “El Tesoro de los niños”.
Cada vez que Accidentón aparece en escena, los niños, las familias, los maestros…, gritarán las palabras mágicas “yo amo la vida” para vencerle y alertar del
peligro al Policía “Falín”, a Inma “la Educadora” y a José Vázquez.
Durante el espectáculo, los niños participarán en todo momento como protagonistas de las historias, ellos buscarán la llave para abrir el cofre y descubrirán su tesoro “la Vida”, ese que quiere robar el malvado Accidentón.
También tendrán la oportunidad de interactuar con un simpático personaje “El Doctor Tortugo”, inventor de un caparazón silla infantil- que protege a los peques cuando viajan en el coche de sus familias.
El espectáculo termina, con los niños pidiendo el compromiso de la Escuela, representada por un profesor; de la Familia, representada por un padre o madre; de la Ciudad representada por una autoridad, de la Policía, representada por un agente, para preservar “El Tesoro de los niños”, todos los representantes se comprometerán en público a proteger las vidas de los niños a través de la Educación Vial y así, vencer al Malvado Accidentón, que huirá de la ciudad dejando allí su túnica negra.
El Policía de la ciudad mostrará contento la túnica del malvado, mientras el Policía “Falín” e Inma “La Educadora” observan que tiene grabado en la espalda los tres asesinos de la carretera, las distracciones, la velocidad, y el alcohol. Identificados los asesinos, la Vaquita Prudencia empodera a los peques para que corrijan a sus familias, y no les dejen distraerse al caminar o conducir, se cuiden de la velocidad y no tomen alcohol si van a conducir, todo ello, con su famoso mugido, “hay que tener Muuucho Cuidado”
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